El buen engendrador por su vaca empieza

¿Existen los ovnis? ¿Existe el yeti? ¿Existe el hombre tlacuache? ¿Existe la justicia social? No lo sabemos porque no hay pruebas fehacientes que garanticen la presencia de estos mitos geniales. Lo que sí podemos asegurar es la existencia de personajes incomprendidos como Vicente Fox, que además de engendrar vacas pudo procrear otros zombis mutantes del erario sideral.

• Engendró el pulpo del enriquecimiento inexplicable dotado con tentáculos tapizados con ventosas que llegaron hasta las arcas del Estado y a los bolsillos del pueblo chambeador.

• Junto con Martita, engendró la vaca loca de Vamos México, que pastó en los inconmensurables campos de la Lotería Nacional.

• Engendró al afamado y nunca visto escritor José Luis Borgues, que no ganó el Nobel ni el Alfaguara, pero es tan famoso como la Banda Cañaveral.

• Engendró el mágico mundo de Foxilandia, sostenido en los pilares cívicos del Prozac, también conocido como el país de nunca jambar.

• El Güero Castañeda, que le puso el toque metrosexual al gabinetazo.

• El elefante blanco mejor conocido como Megabiblioteca Vasconcelos, y sus goteras, que no fueron precisamente las que atentaron contra Espectrito II y La Parkita.

• Sari Bermúdez. Sin palabras.

• Frases inolvidables como el “comes y te vas” y el “¿yo por qué?” se convirtieron en los mantras del sexenio pasado… por armas.

• Engendró negocios chocolatosos de los Bribiesca Bros., como el de las mandarinas chafaldranas que le vendieron a Pemex.

• El paraje San Juan y el predio de El Encino.

• El tristemente célebre Chiquihuitazo fue su engendro no reconocido; se desentendió de él cuando le preguntaron sobre su paternidad.

• Carlota Robinson y Lino Korrodi fueron engendrados por Vicente y, a su vez, engendraron los Amigos de Fox.

• Los Macheteros de Atenco nacieron porque les querían pagar a siete pesotes el metro cuadrado los terrenos para construir el malogrado nuevo aeropuerto.

Si Fox pudo engendrar estas criaturas, está claro que puede procrear bisteces de cuatro patas. En Foxilandia sí se le pueden pedir peras al olmo.

Si tiene cuernos, puede engendrar vacas. Foto: Miriam Sánchez

QRR/Tacho