Ventaja de tomar la delantera
Santiago Creel sabe muy bien lo que hace: la experiencia histórica, dentro de su partido, le indica que quien toma la delantera tiene mayores posibilidades de convertirse en el próximo candidato de su partido. Claro, no siempre el que se adelanta llega a la meta; es algo que se ve, se observa, en muchos deportes; incluso, a algunos, por adelantarse reciben un castigo. Por algo, en la era del priato se decía: el que se mueve no sale en la foto.
Pero Santiago Creel está convencido de que, en los tiempos modernos, la oportunidad de moverse a tiempo, de desmarcarse, es obtener una ventaja inicial que puede ser definitiva al momento de la decisión. Y es que entre los panistas no pueden olvidar lo que sucedió con Vicente Fox y con Felipe Calderón: ambos se adelantaron y prácticamente impusieron su candidatura presidencial.
Vicente Fox era gobernador de Guanajuato y se la pasó de activista, hasta fundó al grupo de “Los amigos de Fox”. Llegó solo a la lucha por la candidatura, nadie le hizo sombra. Y en el caso de Calderón, se recuerda cómo en Guadalajara, siendo secretario de Energía y Minas, el Gobernador lo destapó como precandidato. El enojo foxista fue tanto que prácticamente lo cesó: y tiempo tuvo, Calderón, para planear, diseñar y organizar una precampaña que lo llevó a la candidatura.
Santiago Creel sabe que no está solo. Ernesto Cordero y Josefina Vázquez Mota están en la pelea; su decisión, de pedir licencia para dedicarse al proselitismo, tiene varios puntos a su favor: 1) Obligar al resto de los panistas a dejar el cargo público, para que no dispongan de recursos institucionales a su favor; y, 2) Dedicar tiempo a su promoción, no puede darse el lujo de perder puntos en su posicionamiento.
En el caso del PRI, la historia y experiencia es otra: quien toma la delantera, como sucede con Enrique Peña Nieto y en cierta medida Manlio Fabio Beltrones, corre el riesgo de ser el imán para los ataques, que es, a fin de cuentas, lo que está sucediendo con el Gobernador del Estado de México: ¿Le sucederá lo mismo que a Montiel? Todo hace indicar que Manlio puede jugar el papel de Judas o el de mejor vendedor de apoyos; de ser lo segundo, hagan de cuenta que le aprendió bien la lección a Elba Esther Gordillo.
En fin, lo que pidió Creel a sus correligionarios ambiciosos va también para los precandidatos de otros partidos. Ya Marcelo Ebrard dijo que él en diciembre deja el Gobierno del Distrito Federal. Peña Nieto también entregará el poder… y Andrés Manuel López Obrador no se puede preocupar: lleva más de seis años en precampaña.
Pero Santiago Creel está convencido de que, en los tiempos modernos, la oportunidad de moverse a tiempo, de desmarcarse, es obtener una ventaja inicial que puede ser definitiva al momento de la decisión. Y es que entre los panistas no pueden olvidar lo que sucedió con Vicente Fox y con Felipe Calderón: ambos se adelantaron y prácticamente impusieron su candidatura presidencial.
Vicente Fox era gobernador de Guanajuato y se la pasó de activista, hasta fundó al grupo de “Los amigos de Fox”. Llegó solo a la lucha por la candidatura, nadie le hizo sombra. Y en el caso de Calderón, se recuerda cómo en Guadalajara, siendo secretario de Energía y Minas, el Gobernador lo destapó como precandidato. El enojo foxista fue tanto que prácticamente lo cesó: y tiempo tuvo, Calderón, para planear, diseñar y organizar una precampaña que lo llevó a la candidatura.
Santiago Creel sabe que no está solo. Ernesto Cordero y Josefina Vázquez Mota están en la pelea; su decisión, de pedir licencia para dedicarse al proselitismo, tiene varios puntos a su favor: 1) Obligar al resto de los panistas a dejar el cargo público, para que no dispongan de recursos institucionales a su favor; y, 2) Dedicar tiempo a su promoción, no puede darse el lujo de perder puntos en su posicionamiento.
En el caso del PRI, la historia y experiencia es otra: quien toma la delantera, como sucede con Enrique Peña Nieto y en cierta medida Manlio Fabio Beltrones, corre el riesgo de ser el imán para los ataques, que es, a fin de cuentas, lo que está sucediendo con el Gobernador del Estado de México: ¿Le sucederá lo mismo que a Montiel? Todo hace indicar que Manlio puede jugar el papel de Judas o el de mejor vendedor de apoyos; de ser lo segundo, hagan de cuenta que le aprendió bien la lección a Elba Esther Gordillo.
En fin, lo que pidió Creel a sus correligionarios ambiciosos va también para los precandidatos de otros partidos. Ya Marcelo Ebrard dijo que él en diciembre deja el Gobierno del Distrito Federal. Peña Nieto también entregará el poder… y Andrés Manuel López Obrador no se puede preocupar: lleva más de seis años en precampaña.
Meltón Guevara Castillo
El Diario de Ciudad Victoria
El viejo foxismo. Magú
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